Algo viejo, algo nuevo, algo prestado y algo azul

Una de las tradiciones más seguidas de las novias que deciden pasar por el altar son los complementos que debe llevar la novia para que la nueva etapa que comienza sea plena y feliz. ¿Os habéis preguntado el por qué de esta tradición? Te damos las claves.

Algo VIEJO: se usa para mostrar el sentido de continuidad en la vida y la unión de la novia con su pasado. Los lazos familiares, los amigos y las costumbres siguen siendo las mismas, tan sólo se adaptan. Lo viejo simboliza lo que se deja atrás.

  

¿El qué? una joya o el vestido de novia perteneciente a algún familiar.

Algo NUEVO: representa la esperanza de un futuro óptimo.  Simboliza el cambio, la renovación del espíritu y la nueva vida que comienza.

  

¿El qué? el vestido de novia, los zapatos, una joya o la ropa interior.

Algo PRESTADO: hace alusión a la vieja superstición de que la felicidad se puede atraer usando algo de alguien que sea feliz. Simboliza la amistad. Para cumplir con la tradición, el objeto debe ser devuelto después del enlace.

  

¿El qué? una joya o las arras.

Algo AZUL:  tiene sus orígenes en el antiguo Israel donde las novias portaban una banda de color azul. El objeto azul representa la fidelidad y la lealtad. Antiguamente se mantenía oculto. Algunas novias llevan el nombre de los novios y la fecha de la boda bordados en hilo azul en el interior del vestido. Otras novias, quizá las más supersticiosas, llevan oculto en el vestido un imperdible con un pequeño ojo turco. Hoy en día, las novias optan por lucirlo en lugares como el ramo incluyendo en él flores azules como hortensias y jacintos o hasta los propios zapatos. ¿Recordáis los fantásticos Manolo´s con los que se casó Carrie Bradshaw? Si te perdiste el post del mes de junio dedicado al diseñador Manolo Blahnik, puedes volver a verlo AQUÍ

Y tú... ¿Ya tienes tu algo viejo, algo nuevo, algo prestado y algo azul?